Nos dirigíamos al Aventura Plaza, les diré que casi no me gusta acudir a estos centros tan grandes, con un mar de gente ávidos y exaltados por efectuar compras; bueno mi sobrina mayor me acompañaba, tenía que comprarle algun vestidito de moda, como todos saben cuando las niñas van de compras - como dicen los Colombianos - me toco esperar sin chistar, es el infinito tiempo que se toman elegir la prenda más "adecuada", que el universo es tan sólo un pequeño grano de arena.
Casi al llegar al bendito centro comercial Aventura Plaza; por una avenida atestada de autos; doblo a la derecha e ingreso, no sin antes pasar por la garita de control donde te entregan un ticket de estacionamiento.
Tremendamente confundido, buscando un sitiecito para estacionar mi auto de impecable apariencia; todo ello, mientras mi sobrina; la mayorcita de las hijas de mi hermano; que trabaja actualmente en Lima; me dijo; cuando unos señores que lavan los carros que visten uniforme naranja; se acercaban al auto; ella me contó: "Mi papá es JEFE de todos ellos"; a lo qué, sorprendido, sólo atiné a decirle porqué es el JEFE DE ELLOS?.
A lo que ella muy risueña me contó, con toda la sapiencia que les da la vida; que cuando su papi estaciona su auto en este centro comercial, se le acercan los hombres de naranja y dirigiéndose a mi hermano le dicen en coro: "¿JEFE, LE LIMPIO EL CARRO?".
Volteé y miré a mi sobrina, su rostro bromista era increíble acompañado de una sonrisa de verano radiante y me reí acaloradamente, diría que estrepitosamente; mientras la voz aguda de la niña, que me recuerda a mi Madre, me decía burlonamente que baje el volumen de mi risa, claro está, que es imposible esta petición y seguí riéndome de la vida, acompañado de esta preciosa niña.
jueves, 11 de septiembre de 2014
sábado, 6 de septiembre de 2014
El sueño me gana
Estábamos en el carro, una tarde cualquiera, solos conversando de tú a tú, como decía mi Viejita; le lance la pregunta que me venia angustiando. Porque te levantas tarde para ir al colegio? y alcé una ceja, la que se quedó a medio camino de su estiramiento total; porque de pronto la pequeñita con cara de adulta me disparó a quemarropa: "Es que EL SUEÑO ME GANA"; cuanto me costo no reírme de la respuesta y de su cara de seriedad.
Cual crees que sea la solución para que no te gane el sueño? Le pregunté.
Seguía con las locas ganas de reírme.
Y ella muy sería, planteando su hipótesis de vencer a ese sueño que atrapa a casi toda la familia, señaló firmemente: Sabes, creo que la solución está en que debo dormir en la tarde un poco, y así compensar el sueño, y así levantarme más temprano, pero no puedo - con cara afligida continuaba- no puedo dormir en la tarde, lo he intentado pero me es difícil, muy difícil.
Sólo atiné e indicarle; claro está, con la seriedad del caso, de que una niña de 5 años debe dormir unas 10 horas, por lo que debe acostarse como máximo a las 10 de la noche, para que se levante a las 8 de la mañana y pueda cambiarse e ir al cole con el tiempo apropiado, luego de ello su mamá ingresó al auto y salimos raudos a la casa.
A la mañana siguiente....el sueño le ganó nuevamente...ella muy desparpajada de huesos, me miraba seria, mientras se arreglaba; casi llegamos tarde al colegio, ella oronda entro a su centro de estudios, como cuando una Reyna llega a un un baile, donde todos, sin excepción deben hacerle una reverencia...
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